Los cambios que llevan al emprendedor al éxito
Cuando la idea de negocio de un emprendedor cobra vida, este se enfrenta a un riesgo: querer ajustarse a los paradigmas de la vida laboral que ha conocido hasta entonces. Él sabe que no quiere depender por siempre de su empleo, así que la mentalidad debe dar un giro.
Ya no estás en una oficina cumpliendo órdenes de otros. Aquí van los cambios que llevan tu emprendimiento al éxito.
Ser proactivo
Ya no puedes esperar a que alguien te asigne las tareas. Tu autodisciplina es la que te va a llevar a ver resultados en tu negocio. Nadie te va a estar monitoreando la hora de entrada y de salida. Eres tú quien sabe a qué hora levantarse de la cama para atender a tus clientes.
Acuérdate de tus motivadores iniciales. Deja atrás el cansancio como pretexto. Huye de la tentación de darte por vencido.
Delegar
Es desgastante querer hacer todo. Por supuesto que no es un camino directo al éxito. Aprende a asignar a otros las tareas que deben hacerse. Rodéate de los mejores: en quienes puedas confiar, que sepas que están capacitados en las tareas que les asignas y que estén comprometidos con el bienestar de tu negocio.
“Debes brindarle toda la información y herramientas para que hagan su trabajo sin inconvenientes ni limitaciones”, aconseja Steve Jobs.
Crea protocolos y formatos para el trabajo que realice tu equipo. Asegúrate de que hayan entendido bien tus instrucciones.
Asumir tu responsabilidad y encontrar soluciones
Todo lo que sucede en tu negocio es tu responsabilidad. Ya no puedes buscar culpables. Cuando te comprometes con un cliente, asegúrate de contar con el personal capacitado y los recursos necesarios para entregar lo que prometiste.
Deja de disculparte por algo que delegaste y salió mal. En vez de comenzar a señalar a tus colaboradores, busca soluciones para cumplir con tu cliente. Cuando incumples se afecta toda la imagen de tu negocio.
Enfocarte en las oportunidades
Ya no pienses en cuánto tienes, sino en cuánto puedes hacer con lo que tienes. Los recursos no son limitaciones. Sé creativo para optimizarlos. No modifiques tus metas de acuerdo con tus recursos. Mejor pregúntate cómo vas a usarlos para alcanzarlas.
Ejercitar tu habilidad para las ventas
Ya has leído mucho acerca de cómo iniciar un negocio y cómo aumentar tus ventas. Te has aprendido de memoria los consejos. Pero no vas a saber lo que es hasta que lo lleves a la acción.
Si aún no comienzas tu negocio, es un buen momento para conocer desde ahora qué es tener clientes. Llega a un acuerdo con algún amigo o alguna empresa para vender sus productos y recibir tu comisión. Cuando llegue la hora de atender tu negocio, ya vas a saber por tu experiencia cuál es la estrategia de venta que más te funciona.
Ver el valor de las cosas
¡Cuidado con la atracción a los precios bajos! Claro, te dan la oportunidad de adquirir una mayor cantidad del producto o de comprar también otras cosas. Pero que sea barato no significa que vale la pena. Dejarse seducir por un precio bajo podría costarte mucho más a la larga.
La evolución es lo que indica que tu negocio sigue vivo. Atrévete a desafiar la forma en la que siempre se han hecho las cosas. Acepta las oportunidades de cambio en vez de temerles. Rodéate de colaboradores que compartan esta disposición a salir del status quo.
¿Qué te ha parecido el artículo?
0 Comentario