La plataforma de afectados de LibertaGia lucha por mantener vivo el pulso con la empresa por su fraude

Tras varios meses de silencio sin tener noticia alguna sobre una de las mayores “estafas” producidas (por la cantidad de gente afectada) a lo largo del 2015. Se ha publicado en un medio de comunicación español un artículo en el que se habla sobre LibertaGia y la cantidad de personas que esta “empresa” ha perjudicado con su desaparición.

Este breve artículo nos recuerda, un caso que parece haberse olvidado y del cual lo único que queda es una triste historia y el mal sabor de boca dejado a las personas afectadas.

Recordar que toda la cúpula directiva de la empresa (presuntamente con actividades fraudulentas) ha dejado de dar signos de vida haya por el mes de agosto de 2015, despidiéndose sin dejar huella alguna y desapareciendo algunos de ellos de los círculos sociales donde anteriormente vendían su producto, eso sí, llevándose una gran cantidad de dinero y rompiendo el sueño de muchas personas que creían en el proyecto.

Personajes tales como: Rui Salvador, presidente de la empresa, Cristina Vieira, directora de operaciones, Edson Silva, líder europeo, asesor y consejero, abandonaron la dirección de la compañía eludiendo cualquier responsabilidad y abandonando a todos los afiliados a su suerte. 

Junto con Unetenet, LibertaGia ha sido uno de las estafas piramidales que más afectados han dejado en España a lo largo del 2015.

Artículo integro publicado en las provincias.es

Ganar dinero desde casa por internet simplemente haciendo ´clic` con el ratón del ordenador en una serie de anuncios. Esta sencilla propuesta, especialmente en mitad de la crisis económica, atrajo a miles de personas que vieron una salida a la falta de trabajo y una solución al problema de llegar a fin de mes. Sin embargo, lo que parecía una forma fácil de conseguir dinero se ha tornado en pesadilla para un incalculable número de internautas que todavía tienen esperanzas en recuperar su inversión y el equivalente a las ganancias por el tiempo dedicado.

Esto es, precisamente, en lo que se está centrando la Plataforma de Afectados por Libertagia, que lleva varios meses aglutinando a las víctimas de una estafa piramidal que, según los cálculos del bufete Lemat Abogados, ha atrapado a cerca de 20.000 valencianos (9.000 residentes en la provincia de Valencia, 6.000 en Alicante y 4.000 en Castellón). En total, estiman que puede haber unos 250.000 afectados en España y entre dos y tres millones a nivel mundial, en una estafa piramidal que podrían oscilar entre 1,4 y 1,8 millones de euros.

La mecánica era sencilla. Los participantes simplemente debían dedicarle unos minutos a "clicar" sobre una serie de anuncios y esperar unos segundos. Teóricamente, las empresas anunciantes mejoraban su posicionamiento en las búsquedas de internet por estas entradas y abonaban una cantidad a Libertagia que, a su vez, trasladaba una parte de los beneficios a modo de apuntes digitales a las cuentas de los colaboradores, cifras que, a posteriori, podrían canjearse por dinero contante y sonante. 

Poco a poco el negocio fue creciendo y se abrieron nuevas posibilidades, como la de captar a otros interesados y obtener también una parte de sus beneficios; un timo piramidal en toda regla que comenzó a tener visos de estafa cuando, además, los usuarios podían realizar inversiones para obtener más ganancias que, además, se multiplicaban con el paso del tiempo. Supuestos problemas con las entidades financieras para cobrar este dinero virtual a mediados de este año comenzó a destapar el fraude, y el caso llegó hasta el Juzgado de Instrucción número 5 de Granada, donde se presentó la primera denuncia. 

La última noticia de la compañía data de finales de agosto, momento en el que emitió un comunicado en el que acusaba a los «asociados insatisfechos», los «competidores sin escrúpulos» y los «abogados codiciosos» de haber propiciado la pérdida de confianza en la empresa, que originó que «todos aquellos que tenían compromisos con nuestra empresa se sienten legitimados a no cumplir con sus responsabilidades para con nosotros». Así, espera que el tiempo y las autoridades de cada país «disipen las dudas» que se han generado.