La DSA solicita leyes regulatorias claras para el Network Marketing

El pasado día 15 de septiembre Joe Nocera escribía un artículo en el periódico “The New York Times” en el que se preguntaba como diferenciar un esquema piramidal de una empresa de Marketing Multinivel legal y los criterios que utilizaba la Comisión Federal de Comercio (FTC) para llegar a esas conclusiones. 

Para argumentar este artículo se apoya en las recientes denuncias emitidas por este organismo contra Vemma y en la batalla que mantiene William Ackman contra Herbalife. Esta última ha sido calificada por muchos críticos como una empresa similar en su funcionamiento a Vemma y ha abierto una gran controversia con la cuestión de si Herbalife debería de seguir los mismos pasos que Vemma.

La respuesta por parte de la Asociación de Venta Directa (DSA) no se ha hecho esperar y Joseph N. Mariano, presidente de la asociación ha remitido una carta al director del periódico haciendo unas aclaraciones que dejan bastante claro cuál es la diferencia entre un esquema piramidal y una empresa legal basada en el comercio de Network Marketing, así como los requisitos legales requeridos.

Sr. Director:

Para entender lo que constituye un esquema piramidal, Joe Nocera (artículo escrito el 15 de septiembre) apunta a una reciente decisión del Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos, que concluye diciendo que un esquema piramidal existe cuando la contratación de personal es la base del negocio y no la venta de sus productos. Pero la columna no menciona que hay normas adicionales que ofrecen una orientación útil.

En 2004, el Consejo de Estado sugirió que todos los gobiernos adopten su legislación modelo que defina y procese contra los esquemas. El modelo, o una legislación similar, fue promulgada por 18 estados y es notable por su especificidad.

Hemos ayudado a procesar los esquema piramidales durante muchos años y hemos trabajado en colaboración con la Fundación de Venta Directa de Educación para crear conciencia entre el público. Guiando nuestro esfuerzo hacia la protección del consumidor, siendo esto fundamental dentro de nuestro código de ética, una serie de políticas que prohíben expresamente las pirámides y van más allá de la ley en el establecimiento de estrictos requisitos éticos de negocio para todas las empresas miembro.

En una economía cambiante donde cada vez más estadounidenses están buscando la flexibilidad que ofrece una oportunidad empresarial, la venta directa es ahora más relevante que nunca para esta gente. Los reguladores federales y los responsables políticos deberían considerar que los estados buscasen una mayor claridad en la ley federal.

JOSEPH N. MARIANO

Presidente de la Asociación de Venta Directa

Washington